El nuevo museo ubicado en Doha, Qatar, alberga manuscritos, textiles, cerámica y otros objetos. La mayoría de las obras se han obtenido durante los últimos 20 años y han transformado la colección como una de las más enciclopédicas del arte islámico. Los orígenes y gama de los objetos, de España a Egipto, Irán, Iraq, Turquía, India y Asia Central, complementan tal condición.
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