El Arte Paleolítico ha sido controversial desde su descubrimiento hace bastante más de un siglo, en cuevas de Francia y España. Los investigadores no podían explicarse como era posible que cazadores de la Edad de la Piedra, que se creía vivían en un estado de primitivismo salvaje, pudieran haber realizado tan extraordinaria manifestación artística.
No hay sólo placer estético en estas representaciones, existe también una visión vívida del mundo real que les tocó observar, donde también podemos escudriñar el simbolismo de una mitología y cosmogonía de esa etapa evolutiva del hombre.
No es simple el contenido, contexto y motivo de esas pinturas. Hay hechos que se esconden bajo diversas interpretaciones. La vida de esos hombres, en un mundo perdido tras evos de desconocidas tradiciones, fue rica y compleja, en la medida de sus limitaciones y escasos utensilios destinados a plasmar ideas e imágenes admirables, y que pese al gran espacio de tiempo que nos separa, nos hace sentir tan humanos como ellos lo fueron en su turno.
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